La concretización y actualización de los derechos fundamentales

Este libro intenta mostrar que la interpretación constitucional se caracteriza en el moderno Estado constitucional por un notable grado de apertura. Esta apertura no obedece solo a la amplitud del elenco de criterios, métodos y principios de la interpretación, amplitud que esta obra somete a la debida fundamentación y contraste crítico. También responde a las propias señas de identidad del moderno Estado constitucional democrático: un Estado cooperativo con otros Estados, que está limitado no solo “desde dentro” sino también “desde fuera”. El Estado constitucional se está articulando progresivamente hacia “un razonamiento universal” en sus elementos, especialmente en materia de derechos fundamentales. El principal instrumento de apertura de la concretización de los derechos fundamentales reside sin duda en el art. 10.2 CE. La función de la “interpretación conforme” es doble: por un lado, la actualización permanente del contenido de los derechos fundamentales constitucionales; por otro, la coordinación de una interpretación autónoma más o menos introvertida de los derechos fundamentales con el estándar internacional de protección de los derechos humanos, de manera que ambos marcos de protección sigan una evolución armónica en el más alto nivel del ordenamiento interno, el de la constitucionalidad. De esta forma el Estado constitucional de Derecho tiende a coincidir con el Estado internacionalmente limitado por el Derecho internacional de los derechos humanos.