La apuesta republicanizadora de la 1ª gestora de la Diputación de Navarra.

Palabras clave
España, Navarra, II República, política regional.
Resumen
En este artículo profundizamos en la racionalidad de las apuestas estratégicas republicanizadoras de la primera Comisión Gestora de la Diputación de Navarra entre 1931 y 1933. Navarra, epicentro de las fuerzas contrarrevolucionarias a lo largo de la Segunda República, estuvo gobernada en el primer bienio de dicho periodo por una Comisión Gestora designada por el gobierno central que, formada por siete miembros, integraba un núcleo de tres personas (el socialista Constantino Salinas y los republicanos Rufino García Larrache y David Jaime Deán) que trabajó de forma colegiada en pro de la republicanización de esta provincia dotada de una singular autonomía administrativa y fiscal. Alentados por las posibilidades que, desde su punto de vista, ofrecía el 36 por ciento de los votos obtenidos en 1931 por la Conjunción Republicano-Socialista, esas tres personas pensaron que la República podía asentarse en Navarra por medio de la aplicación de iniciativas relativas al reparto de comunales que beneficiaran a los campesinos más desfavorecidos, complementando desde la administración provincial las medidas de reforma agraria impulsadas desde Madrid. Asimismo, pensaron que sería políticamente rentable un marco político-institucional unitario junto con las provincias vascongadas surgido de un estatuto acorde con la Constitución republicana.
Keywords
Spain, Navarre, 2nd Republic, regional policy.
Abstract
This article delves into the reasons underlying the republicanising strategies of the
first Comisión Gestora of the Navarre Government between 1931 and 1933. Navarra was the epicentre of counter-revolutionary forces throughout the Second Republic. For the first two years (1931-32) it was governed by a management committee known as the Comisión Gestora, designated by the central government. It comprised seven members, with a core of three people (the socialist, Constantino Salinas and the Republicans, Rugino García Larrache and David Jaime Deán) that worked together for the republican cause in the province, which had unique administrative and fiscal autonomy. Encouraged by the 36% of the votes that the Socialists and Republicans together had amassed, they thought that the republic could be established in Navarre by applying initiatives regarding the communal distribution that would benefit the poorest peasants, whilst the
provincial government administration could back this up with agrarian reforms driven through from Madrid. They thought that a single institutional and political system joining Navarre with the Basque provinces would be politically profitable, foreseeing a statute for this in keeping with the republican constitution.