Palabras clave
Oposición antifranquista
represión política
unidad
presos políticos
solidaridad.
Resumen
La movilización unitaria de apoyo a los represaliados políticos es un aspecto prácticamente sin estudiar, pero de notable relevancia, de la lucha antifranquista. Este artículo pretende ayudar a llenar ese vacío. En un contexto de marcado endurecimiento de la represión, las organizaciones clandestinas y los movimientos sociales de oposición se dotaron de una herramienta transversal para ayudar a las víctimas y denunciar su situación. Los primeros ejemplos se documentan en 1967 en diferentes localidades, pero es a partir de inicios de 1969 cuando se constituye el principal germen del movimiento: la Comissió de Solidaritat de Barcelona. Este núcleo inicial y más destacado se extenderá en los años siguientes a otros municipios de Cataluña, primero, y Madrid y otras capitales, más tarde. A través del estudio de la documentación generada por estas nuevas plataformas, así como de la realización de entrevistas a algunos de sus componentes, se constata su importancia como uno de los ejes vertebradores del nuevo tipo de oposición a la dictadura. Gracias al trabajo de las Comisiones de Solidaridad se consiguió amortiguar el embate represivo al tiempo que deslegitimar al régimen y aglutinar las diferentes sensibilidades presentes en el antifranquismo. Asimismo, no puede obviarse la influencia de esa experiencia en la creación de organismos unitarios de oposición durante el franquismo y la transición.
Keywords
Anti-Franco movement; political repression; unity; political prisoners; solidarity.
Abstract
The united mobilization in support of victims of political reprisals is a virtually unstudied aspect of the fight against the Franco dictatorship, yet it is extremely important. This article aims to help fill that void. Amid markedly increased repression, the underground organizations and social movements of the opposition developed a cross-societal tool to help the victims and to speak out against their situation. The first examples were documented in 1967 in different towns, yet it was not until early 1969 that the main origins of the movement took root: the Comissió de Solidaritat de Barcelona [Solidarity Committee of Barcelona]. This initial and most prominent hub would be extended to other cities in subsequent years, first in Catalonia, and later in Madrid and other capitals. Our study of the documentation generated by these new platforms, combined with interviews with some of their members, confirms the importance of this network as one of the main axes of the new mode of opposition to the dictatorship. The work of the Solidarity Commissions made it possible to mitigate the brunt of repression, while delegitimizing the regime and bringing together the different awareness groups within the anti-Franco movement. Mention must also be made of the influence of this experience on the creation of united opposition platforms during the Franco regime and the transition to democracy.