Palabras clave
Ciudadanía de la Unión
privación del disfrute efectivo
derecho fundamental a la vida familiar
situaciones puramente internas
nacionales de países terceros
Acuerdo de asociación con Turquía
cláusulas de stand still
Resumen
El fallo del TJUE en el asunto Dereci confirma una vez más la doctrina basada en la privación del disfrute efectivo de la esencia de los derechos conferidos por el estatuto de la ciudadanía de la Unión y constata su carácter excepcional no siendo suficiente para justificar une mera conveniencia económica o la preferencia del ciudadano por vivir junto a su familia en el territorio de la Unión. Al mismo tiempo, el TJUE otorga un amplio poder de apreciación a los jueces nacionales para concretar su controvertida aplicación, teniendo en cuenta que aún parece adolecer de ciertas dosis de indeterminación, en particular, sobre cuando debe considerarse que un ciudadano se ve obligado realmente a abandonar el territorio de la Unión o acerca de la articulación de esta doctrina con el derecho al respeto de la vida familiar. Frente al enigmático silencio de los asuntos Ruiz Zambrano y McCarthy, dicho engarce constituye una de las principales aportaciones del fallo, diseñando el TJUE una aparente armonioso deslinde de ámbitos de protección. Sin embargo, esta evolución no alcanza aún a eliminar el fenómeno de la discriminación inversa, perdurando por tanto una cierta sensación de discriminación por parte de los ciudadanos europeos estáticos, empresa que quizás sólo sea posible a través de una voluntad política más decidida por parte de los Estados miembros.
Keywords
Citizenship of the Union; denial of the genuine enjoyment; fundamental right to family life; purely internal situations; third country nationals; Association Agreement with Turkey; standstill clauses
Abstract
In Dereci the ECJ confirms the doctrine based on the privation of the genuine enjoyment of the substance of the rights conferred by virtue of his status as a citizen of the Union. At the same time, it ratifies its exceptional character not being sufficient to justify a simple economic convenience or the preference of the citizen for living with her family in the territory of the Union. At the same time, the ECJ grants a wide discretion to national judges to concrete this controversial application, bearing in mind that still seems to suffer from uncertainty. This is especially the case either about the question on when should be considered that a citizen must leave the Union territory or the relationships between this doctrine and the fundamental right to family life. Contrary to the enigmatic silence about his fundamental right in Ruiz Zambrano and McCarthy, this relationship is one of the main contributions of this judgement. To solve this question the ECJ designs an apparently harmonious demarcation of protection areas. Nevertheless, this evolution is not sufficient to eliminate the phenomenon of reverse discrimination, remaining therefore a certain feeling of discrimination for static European citizens. Probably, this only will be possible be means of a more determined political will by Members States.