Autor
Palabras clave
Acción exterior de la Unión Europea
Política Exterior y de Seguridad Común
Política Común de Seguridad y Defensa
Naciones Unidas
gestión de crisis
capacidades civiles y militares
Tratado de Lisboa
Resumen
Desde hace ya más de dos décadas, la Unión Europea viene actuando a nivel internacional en la gestión de conflictos y crisis internacionales, aunque con luces y sombras. Es cierto que se ha insistido más en las luces, pero las sombras son incuestionables. Hay que partir de estas premisas realistas si es que se quiere reforzar el marco de colaboración con las Naciones Unidas. Y es que tanto la planificación como el despliegue de las misiones no siempre se han hecho como corresponde a alguien que quiere desempeñar un papel importante como «actor global internacional». Desde esta perspectiva, el Tratado de Lisboa aporta algunos elementos nuevos, como el Servicio Europeo de Acción Exterior», que pueden contribuir a dar un mayor enfoque global e integrado en la gestión de crisis, concepto que es compartido también por las Naciones Unidas. No obstante, también es cierto que el Tratado de Lisboa deja intactas las competencias estatales en la materia, y que ese enfoque global necesita de unas capacidades cuyas deficiencias son notorias como sistemas de mando, comunicación y control, información estratégica, vigilancia y protección de tropas, transporte estratégico, etc. Así pues, es evidente que hay que reforzar estas capacidades si queremos hacer de esta colaboración con las Naciones Unidas algo creíble y eficaz.
Keywords
European External Action; Common Foreign and Security Policy; Common Security and Defence Policy; United Nations; Crisis Management: Civil and Military Capacities; Treaty of Lisbon
Abstract
Twenty years ago, the European Union started intervening in crisis and conflict management, and also in international crises, with more or less success. If this contribution has focused specially in strengths, more than in weaknesses, those exist too. These realistic premises have to be taken as an origin if the collaboration framework with the United Nations is to be reinforced. The planning and deployment of missions have not always been made as would be expected from an organization that aspires to play an important role as an «international global actor». From this perspective, the Treaty of Lisbon provides the EU with some new elements, such as the European External Action Service, that could contribute to a more global and integrated approach of crises management, concept that is also shared by the United Nations. However, it is also true that the Treaty of Lisbon leaves untouched the sovereign competences in the subject, and also that global approach requieres some specific capacities that are not well developed in the EU, such as command systems, communication and control, strategic information, surveillance and protection of troops, strategic transportation, etc. Therefore, it is evident that those capacities need to be reinforced if collaboration with the United Nations is to become believable and effective.