Autor
Palabras clave
Igualdad, Arbitrariedad, Proporcionalidad, Legislador, Tribunal Constitucional, Justicia, Objetividad.
Resumen
El derecho fundamental del principio general de igualdad que contempla el artículo
14 de la CE encierra contrastes desconcertantes. De este modo, en la jurisprudencia
de los tribunales constitucionales se pueden encontrar planteamientos en
buena medida dispares. La inseguridad se manifiesta especialmente en la formulación
a la que se recurre muy a menudo en el sentido de que el margen de maniobra
del Legislador termina en el punto en el que el tratamiento desigual ya no es compatible con una razón objetiva, produciéndose en consecuencia arbitrariedad. Así, a
partir de 1980 cabe constatar que el Tribunal Constitucional alemán, y después el
resto de los tribunales constitucionales incluido el español, hacen esfuerzos manifiestos
para llegar a criterios más concretos de cara a dirimir la cuestión de cuándo
procede el tratamiento desigual y cuándo no. Muchos consideran este planteamiento
como «nueva fórmula» que consiste básicamente en la incorporación hasta dónde
resulta posible del principio de proporcionalidad. No obstante, los resultados son
hasta ahora de nuevo insatisfactorios, si bien sobre esta base no es descartable que
pueda desarrollarse una concepción más matizada sobre cómo manejar los tratamientos
desiguales por el Legislador.
14 de la CE encierra contrastes desconcertantes. De este modo, en la jurisprudencia
de los tribunales constitucionales se pueden encontrar planteamientos en
buena medida dispares. La inseguridad se manifiesta especialmente en la formulación
a la que se recurre muy a menudo en el sentido de que el margen de maniobra
del Legislador termina en el punto en el que el tratamiento desigual ya no es compatible con una razón objetiva, produciéndose en consecuencia arbitrariedad. Así, a
partir de 1980 cabe constatar que el Tribunal Constitucional alemán, y después el
resto de los tribunales constitucionales incluido el español, hacen esfuerzos manifiestos
para llegar a criterios más concretos de cara a dirimir la cuestión de cuándo
procede el tratamiento desigual y cuándo no. Muchos consideran este planteamiento
como «nueva fórmula» que consiste básicamente en la incorporación hasta dónde
resulta posible del principio de proporcionalidad. No obstante, los resultados son
hasta ahora de nuevo insatisfactorios, si bien sobre esta base no es descartable que
pueda desarrollarse una concepción más matizada sobre cómo manejar los tratamientos
desiguales por el Legislador.
Keywords
Equality, Arbitrariness, Proportionally, Legislator, Constitutional Court, Justice, Objectivity.
Abstract
The Fundamental right is the general principle of equality which is set down in
article 14 of the Spanish Constitution, reveals disconcerting contrasts. So that in the
jurisprudence of the constitutional courts one finds approaches that in a certain way
are disparate. Insecurity is particularly manifest in the way it is often appealed, in
the sense that the margin of manoeuvrability of the legislator ends at the point where
unequal treatment is no longer compatible with the objective reason so as to produce
an arbitrary situation. A procedure that goes no further than that it is practically valid
for any type of application of rules. So that, from 1980 it is worth mentioning
that the German Constitutional Court, and later the rest of the constitutional courts
as well as the Spanish combined efforts to reach a sounder criteria in resolving the
question as to when it should be treated or not as an inequality issue. Many consider
this procedure a «new formula» that basically consists of incorporating as far as it is
possible the principle of proportion. Nevertheless, the results up to now have been
unsatisfactory although on this basis a more concrete concept to be developed is not
ruled so as facilitate the legislator in dealing with inequality issues.
article 14 of the Spanish Constitution, reveals disconcerting contrasts. So that in the
jurisprudence of the constitutional courts one finds approaches that in a certain way
are disparate. Insecurity is particularly manifest in the way it is often appealed, in
the sense that the margin of manoeuvrability of the legislator ends at the point where
unequal treatment is no longer compatible with the objective reason so as to produce
an arbitrary situation. A procedure that goes no further than that it is practically valid
for any type of application of rules. So that, from 1980 it is worth mentioning
that the German Constitutional Court, and later the rest of the constitutional courts
as well as the Spanish combined efforts to reach a sounder criteria in resolving the
question as to when it should be treated or not as an inequality issue. Many consider
this procedure a «new formula» that basically consists of incorporating as far as it is
possible the principle of proportion. Nevertheless, the results up to now have been
unsatisfactory although on this basis a more concrete concept to be developed is not
ruled so as facilitate the legislator in dealing with inequality issues.